Sevilla ha establecido una regulación para controlar el orden de los alquileres de viviendas con fines turísticos. Para ello, es obligatorio obtener una licencia turística si quieres alquiler una vivienda a corto plazo y si quieres promoverlas en plataformas como Airbnb o Booking. Pero, algunas dudas pueden surgir: ¿cuánto tiempo dura esta licencia? Y, ¿cuáles so los requisitos implica mantenerla activa? En este artículo, contestaremos a estas preguntas importantes para los que quieren alquilar su vivienda de forma turística en Sevilla.
¿Cuánto tiempo se puede alquilar un piso turístico?
Una vez que el propietario de la vivienda tiene la licencia, podrá alquilar su vivienda todo el año y sin limite de días, siempre que cumpla con los requisitos establecidos por la normativa local y autonómica. En algunos barrios de Sevilla más turísticos, hay la probabilidad que en el futuro se establecerá algunas restricciones.
Cuando es el caso de una vivienda en una comunidad de vecinos, el propietario tendrá que revisar los estatutos de la comunidad, puede que ella limite el uso turístico de la vivienda. Y obviamente es muy importante declarar todos los ingresos a Hacienda, recordamos que el alquiler turístico está sujeto a tributación.
¿Cuánto cuesta la licencia turística en Sevilla?
En términos económicos, obtener la licencia turística en Sevilla no tiene un coste elevado por parte de la Junta de Andalucía, que es la autoridad que regula y concede este permiso. El trámite consiste en inscribir la vivienda en el Registro de Turismo de Andalucía (RTA), lo cual es gratuito. Sin embargo, es recomendable contar con el asesoramiento de un técnico o gestor que revise si el inmueble cumple con los requisitos exigidos (ventilación, mobiliario, aire acondicionado o calefacción, etc.). Estos servicios pueden costar entre 100 y 300 euros, dependiendo del profesional.
Adicionalmente, si se requiere una cédula de habitabilidad o alguna adaptación en la vivienda, los costes podrían incrementarse. Por ello, es aconsejable hacer un estudio previo para calcular la viabilidad económica del alquiler turístico en cada caso.